1. Desmoldeo
Se parte del racimo de piezas para hacer un desmoldeo con un martillo automático.
Se parte del racimo de piezas para hacer un desmoldeo con un martillo automático.
Se separan las piezas mediante corte con plasma.
Se eliminan los restos de los “bebederos” del proceso de fundición, mediante máquinas pulidoras de banda.
Se chorrean las piezas con arena para una primera limpieza.
Se registran los datos dimensionales de las piezas, “As cast”.
Se eliminan los excesos de material y otros defectos visuales hasta conseguir un correcto acabado cosmético.
Tras el tratamiento térmico requerido, se procede al enderezado de las piezas sobre utillajes de conformado de precisión.
Se realiza una comprobación final tanto visual como dimensional.
El repaso de piezas se caracteriza en nivelar los saltos que deja el mecanizado, ajustando las piezas según tolerancia y exigencia técnica del cliente.
Este proceso que se realiza en una cabina separada, consiste en ajustar y repasar todos los defectos que deja el mecanizado.